08 abril 2013

hoy vi a mi destino mientras volvía a casa. me ha tocado uno con la ropa desgastada. teníamos un aire en común, fue fácil identificarlo como algo mío. nos miramos directamente y seguí andando. no se si en modo cobarde o en modo valiente. giré la cabeza varias, diez veces, para ver en que modo se alejaba él. no lo vi, ni al primer ni al décimo giro de cabeza. compré tabaco. ocho esquinas. mi destino vive a veintidós pasos de casa. quizás mañana. hoy he quedado con la primavera.

*

estoy pensando la manera de llevarme a la primavera a la cama. follármela hasta gastarle los pétalos, las ansias, el polen, la alegría. quiero gastarle la sonrisa y los días. gastarla entera entre mis piernas. y después, por la mañana, ella con hambre y yo con la sensación de haber pasado noventa días en la cama. me pedirá un desayuno y yo le daré una excusa. he quedado con el verano para fumarnos los diecinueve que me quedan. el primero lo llevo en el bolsillo, por si me cruzo con el destino, otra vez.

1 comentario :

  1. Tuve la suerte de descubrirte ayer, bueno hace dos horas y treinta y siete minutos, pero ayer al fin y al cabo. Te escuche, leí y pesé a que vi que ya tenías una (afortunada) espalda en la que perderte, no quería dejar pasar la oportunidad de declarar el platónico al menos. Pasaste a ser lectura obligada, un saludo. :)

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