mi enfermedad
te escribo porque me estoy muriendo. todos estamos muriendo, pero yo lo hago más rápido. mi edad es menor si empezamos a contar desde lo que nos queda. te escribo y te digo que me estoy muriendo para alertar a tu atención, para que me leas diferente e intentes comprender una parte de mi. no tengo miedo por lo que no necesito que sientas pena. ya lo sabía, bueno, todos lo sabemos, pero yo antes. tengo menos incertidumbre, más ventaja y menos vida.
tengo dos enfermedades.
la primera siempre ha estado. desde que nací hasta siempre. con el paso de los años se hace más fuerte porque yo me hago más débil. pierdo movilidad y me siento inútil, porque en ese momento es lo que soy. va a poder conmigo. luchar sería elevar la desesperación. vendrá a por mi en una cama. y si me quieren, si alguien me quiere en ese momento, esa cama no será blanca.
la segunda. estoy enferma de un concepto que creé hace unos años, que me consume. no sé si vivo o espero. a veces no encuentro la diferencia entre esperar y encontrar. será la exposición al riesgo. necesito inestabilidad para vivir.
la primera no tiene solución. de la segunda siempre te he culpado. no tuve razón. ahora se que sino me expongo a lo incierto no es por falta de tu mano, es por falta de valentía. es por vivir como creen que soy, no como soy.
me estoy muriendo buscando un sentido a la vida diferente. me odio un poquito todos los días, me odiaría hasta no poder más si cayese en lo que esperan. me salvan los momentos en los que me falta el aire. no sobrevaloro respirar, ni el amor romántico. me salvan los momentos de complicidad.
estoy enferma de mi misma porque soy enfermedad.
Aceptar y no tener miedo es un paso muy importante para vivir. Pero es un tema complicado que muchas veces se escapa a nuestro entendimiento, aunque sea lo que se lleva repitiendo desde que el mundo es mundo.
ResponderEliminarMuerte al amor romantico!
ResponderEliminarMagnificas palabras, maravillosa imagen.
ResponderEliminar